Aprovechando unos días de vacaciones durante el verano de 2020, hice una escapada fotográfica al Pirineo aragonés. Es una de mis zona favoritas, tanto para practicar senderismo como para hacer fotografía. Hace poco hablamos de esta zona en un episodio del podcast.
En este caso, la localización escogida fue el Valle de Aísa. Tanto el camino para llegar al fondo del valle, por un bosque remontando el río, así como la propia cabecera del valle, son unos lugares espectaculares. Mi idea principal era hacer algunas nocturnas que tenía planificadas, pero no podía dejar escapar la oportunidad para hacer también alguna fotografía del atardecer.
Todas las fotografías que vas a ver son de la misma tarde/noche, y en orden cronológico. Una jornada muy productiva, sobre todo la parte de fotografía nocturna. Encontrar una zona en la que poder hacer tantos encuadres diferentes no es nada fácil, así que había que aprovecharlo.
Fotografía de atardecer
Ya he dicho muchas veces que una cosa muy importante en fotografía nocturna, tanto desde el punto de vista fotográfico como de tu propia seguridad física (más aún cuando sales solo) es hacer una visita a las localizaciones mientras aún haya luz. De esta forma puedes revisar los encuadres que habías planificado, buscar otros diferentes y comprobar que no hay ningún peligro.
Habitualmente, esas pruebas de encuadre no van más allá, porque son fotografías de elementos (como vehículos abandonados o ruinas) en los que gran parte del atractivo, al menos para mí, reside en la iluminación y en los elementos del cielo que puedan acompañar al sujeto. En este caso, esas fotografías sí fueron un fin en sí mismo.
Además, una vez que lo bueno de la hora dorada ya había terminado, aproveché para hacer la foto para el perfil de las redes sociales, con la camiseta del podcast. Suerte que no pasó nadie mientras tanto, porque se habría encontrado con un fotógrafo encuadrando una pared sin ningún interés….
¿Quieres un revelado avanzado sin salir de Lightroom?
Gracias a estos presets, tendrás un revelado sencillo, ordenado, sin salir de Lightroom, y en menos de 15 minutos. Incluye máscaras de color, luminosidad o del cielo/suelo, que sea crean automáticamente cuando sean necesarias.
Entre otros ajustes, con estos presets podrás sacar detalle de la Vía Láctea, eliminar las estrellas con menos brillo o reducir la contaminación lumínica del cielo o del suelo.
Fotografía nocturna
Después de estas fotografías de la hora dorada, me fui al resto de encuadres que tenía pendientes para las nocturnas, aprovechando que aún quedaba suficiente luz y mucho tiempo hasta el anochecer astronómico. Hay veces en las que no necesito esperar hasta que la oscuridad en el cielo sea máxima, sino que puedo empezar algo antes y ganar tiempo. En este caso, que las primeras fotografías serían con la Vía Láctea, no quedaba otra opción más que esperar al anochecer astronómico para poder captar el máximo detalle en la Vía.
Éste es uno de los sitios donde he podido ver la Vía Láctea con más detalle. A pesar de que el centro galáctico está orientado hacia la zona con mayor contaminación lumínica, ésta es mucho más baja de lo que se suele ver en la Península. Gracias al refugio, pude equilibrar la composición, darle más profundidad a la escena y, sobre todo, tener un sujeto en la fotografía.
Después, y una vez que la Vía Láctea estaba en la posición que quería, fui a por el motivo principal para ir a esta localización: una fotografía panorámica del arco completo de la Vía Láctea, de dos filas, con 7 tomas en cada una de las filas, y que ya conté en su entrada.
Una vez hechas todas las tomas de la panorámica, volví a los dos encuadres que había hecho durante el atardecer para hacer las fotografías nocturnas.
Comenzaban a aparecer nubes, que en este caso le dan mucho dinamismo y color a la foto.
¿Te gustaría aprender fotografía nocturna mientras realizas otra actividad?
No te pierdas mi podcast, Aportando Luz. El podcast en el que hablamos de la técnica a emplear en fotografía nocturna, del equipo fotográfico necesario y consejos o trucos que me funcionan a mi. También habrá charlas con otros fotógrafos, para que nos cuenten cómo viven ellos la fotografía nocturna y nos den su punto de vista.
No obstante, siguieron llegando las nubes, hasta casi cubrir el cielo por completo. Solo a través de un hueco entre las nubes se podían ver ya las estrellas.
Para la anterior fotografía, quería probar el comportamiento de la Sony A7III con altos ISOs, como ya conté en esta entrada del blog. En estas dos últimas fotografías se nota que la luz que llega a la escena es mucho menor que en las anteriores, por estar situadas más abajo en el valle. Para mitigarlo, opté por hacer varias tomas en el primer encuadre para luego reducir el ruido mediante el apilado. En el segundo encuadre hice una toma para el cielo, con un ISO alto y un tiempo de exposición inferior a 30 segundos (para mantener las estrellas como puntos), y otra para el suelo, con un ISO más bajo pero mayor tiempo de exposición
Y antes de dar por terminada la sesión, tocaba detenerse y echar una última mirada atrás hacia el valle que dejaba atrás.