Usar un tracker para fotografiar el cielo nos permite exponer durante más tiempo y captar mucho más detalle en el cielo, bajar el ISO y cerrar algo más el diafragma.
No obstante, también tiene algunas contras, como los problemas al unir la fotografía hecha con el tracker encendido, para el cielo, y apagado, para el suelo. Cuando nuestro sujeto sea complejo, como puede ser un árbol, esa tarea puede ser muy ardua y compleja.
En esta píldora veremos las diferentes opciones que tenemos para evitarnos ese trabajo en el ordenador, así como sus ventajas y desventajas, algunas de ellas éticas.